El Mané Garrincha de Brasilia fue testigo del último encuentro previo a la final. Cuando comenzó la Copa América las 10 selecciones participantes llegaron a Brasil con la ilusión de levantar el máximo trofeo continental, y en la previa ninguno quería quedarse a un paso de la gloria.
Sin embargo ambos entrenadores declararon que a pesar de no haber llegado al partido decisivo en el Maracaná, este duelo era una buena oportunidad para reconocer a aquellas selecciones que alcanzaron las semifinales y que iban a poner lo mejor que tengan a disposición. Rueda repitió casi el mismo equipo que cayó frente a Argentina con la inclusión de Cardona por Borré, para darle más generación de juego. Por su parte, Gareca, que cumplió 80 partidos dirigiendo a la selección peruana, recuperó a su figura, el extremo André Carrillo, luego de cumplir una fecha de suspensión.
Colombia arrancó con todo, tratando de imponerse desde el primer minuto, con el volante como eje y lastimando por las bandas con la velocidad de Díaz y Cuadrado. Perú entró dormido y Lapadula quedaba aislado. Los cafeteros tenían la pelota pero no lastimaban. Con el transcurso de los minutos los incaicos se despertaron y emparejaron las acciones.
Promediando la primera mitad llegó la primer situación clara. Cueva le ganó la espalda a Barrios y cuando Mina lo salía a atorar, tocó con Lapadula para dejarlo cara a cara contra Ospina. El delantero del Benevento de Italia definió a contra pierna del arquero colombiano pero no pudo convertir. Minutos más tarde el seleccionado de Gareca avisó por segunda vez. Peña encaró desde la izquierda, se sacó de encima la marca de varios rivales pero cuando llegó al área no pudo definir con claridad.
La tercera oportunidad que tuvo Perú no perdonó. El propio Peña realizó un cambio de frente de más de 40 metros para Cueva, que picaba por la banda izquierda. El “10” enganchó hacía el centro, y aprovechando al máximo la diagonal de Lapadula que arrastraba la marca de Tesillo, asistió a Yotún, que llegaba solo por la izquierda. Definición exquisita con la cara interna de su botín izquierdo para abrir el marcador. Golazo de Perú.
El complemento fue totalmente distinto. Colombia salió con todo y a los 4 minutos Cuadrado empató el partido con un golazo de tiro libre. A la jugada siguiente Díaz pudo anotar el segundo gol colombiano pero su volea se fue apenas desviada. El elenco cafetero era una tromba y Perú no podía salir del asedio.
Cuando Gareca se disponía a realizar una variante, Colombia le pago con su propia moneda. Pelotazo a la espalda de Corzo para Díaz que estaba imparable. Control y mucha clase para vencer la resistencia de Cállese y poner arriba a los de Rueda. A partir de ahí el partido fue todo de ida y vuelta. Perú buscaba desesperado el empate y Colombia tenía espacios para la contra.
Desafiando el poderío colombiano en las pelotas paradas, Lapadula se anticipó a todos en un tiro de esquina y fusiló a Ospina de cabeza. Partidazo. Los dos eran peligrosos en ataque pero muy endebles en defensa.
En tiempo de descuento Díaz encaró desde el vértice izquierdo del área de Gallese y sacó un zapatazo inatajable para colgarla de un ángulo y provocar el delirio colombiano. 3 a 2 y tercer puesto para el seleccionado de Rueda.
Perú llegó a semifinales por cuarta vez en las últimas cinco ediciones, dónde obtuvo un subcampeonato y dos tercer puesto. Mucho mérito de Gareca alcanzando dos semifinales de Copa América y obtener la clasificación al mundial luego de 36 años. Colombia no disputaba este partido desde el 2016, cuando venció a Estados Unidos.
|
.png)
