Los primeros momentos fueron de estudio, de no arriesgar, donde Miguel Russo buscó más solidez con 3 centrales (Zambrano López e Izquierdoz) y dos por las bandas (Capaldo y Fabbra), pero resignaba creatividad y elaboración en el mediocampo. Por eso la jugada más clara fue a los 33 minutos un envío frontal del central peruano a espaldas de la zaga racinguista, donde Villa se filtró para rematar al cuerpo de Gaston Gómez que achicó rápido la posición. Por su parte, La Academia fue solidaria en tapar pases y no dejar huecos y si bien tuvo por momentos el manejo del balón, le faltó ideas y precisión en los metros finales. Tuvo aproximaciones en el área rival, que resolvió sin chispa e inventiva.
Las conexiones entre Cardona y Fabbra fueron lo más lucido en el cuadro Xeneize, y los pelotazos para las diagonales de Villa fueron situaciones que no pudo aprovechar. En lineas generales hubo pocas emociones en los primeros 45
Para el complemento Cáceres ingresó por un golpeado Pillud, Boca apareció con más actitud y se adelantó en el campo, dominó el desarrollo pero sin provocar situaciones claras, más que algún remate aislado o pelota parada, siempre bien controlado por un seguro golero académico.
El equipo de Pizzi resignó sus ambiciones ofensivas y pobló el medio para no desacomodar el andamiaje defensivo, donde ni siquiera pudo patear al arco boquense. Así pasaron los minutos, casi sin emociones, y abrieron paso a los penales.
Tevez comenzó la serie con un remate al travesaño, y Gomez se convirtió en figura al detener el tiro de Pulpo Gonzalez. Hasta que nuevamente quedó Copetti para sellar el pase a la Final ganando La Academia 4 a 2
Muy meritorio este Racing de Pizzi. No brilla. Hace lo que pide el partido. Tiene un grupo fortísimo, muy unido y compenetrado y aunque LO PERJUDICARON, sigue. Es un equipo que empuja y ejecuta lo que planea el DT
RACING está en la Final merecidamente. Continuará escribiendo su rica y gloriosa Historia |
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