El regreso de varios futbolistas tras superar el covid era un aliciente para que los de Sanguinetti vuelvan a la victoria luego de 3 partidos sin triunfos, sin embargo se notó la falta de ritmo y Banfield chocó contra un equipo bien parado y que apostó a aprovechar al máximo los errores de su rival.
Los primeros minutos del partido fueron un calco de lo que sucedió durante los 90 minutos. Platense cedió la iniciativa y trató de exprimir al máximo la falta de precisión de un equipo que no llegaba en óptimas condiciones físicas. Galoppo no estuvo fino en los pases, Álvarez no tuvo profundidad y a Payero le costó asociarse para generar juego y poder habilitar a Pons, que quedó demasiado solo contra los centrales del Calamar. Además la ausencia de dos pilares de la defensa como Maldonado y Coronel fue una invitación para que Bertolo gane constantemente por la banda izquierda y sea la carta más peligrosa de Platense en ataque.
Con el correr de los minutos el equipo del “Chocho” Llop se fue sintiendo más cómodo con el desarrollo del partido y con ataques directos complicó al Taladro. Promediando la primera etapa llegó el único gol luego de que Recalde se anticipe a todos en un tiro de esquina y deje sin chances a Arboleda. A partir de ahí Banfield se desordenó y le costó generar situaciones.
En el segundo tiempo los locales se quedaron sin piernas y los cambios que introdujo Sanguinetti no pudieron torcer la historia ante un Platense que se cerró bien atrás y no dejó espacios. Con este resultado, el Calamar se llevó su tercer triunfo de visitante en cinco presentaciones fuera de casa. Por su parte, Banfield suma 4 partidos sin triunfos y complica sus aspiraciones para avanzar a la siguiente instancia. |