Al comienzo se notó que ambos equipos no sólo compartían el mismo esquema estratégico, un 4-4-2 bien marcado, iguales eran las intenciones, imponer el toque prolijo desde la salida para cambiar de ritmo en ¾ y habilitar a sus dos hombres de punta.
A su vez también compartían la ausencia de un toque final preciso que consolide el toqueteo del balón en medio campo, los defensores anticipaban bien a los delanteros. Así el partido se volvió tensionante, parecía que cualquier error nimio podría ocasionar la diferencia.
Cumplidos los 15´ se veía una paridad casi absoluta, tal vez mejor parado Victoriano Arenas y más enredado Ituzaingó.
A los 18´ el corpulento Águila gana una pelota para el CAVA cerca del área y su tiro cruzado se va muy cerca del palo derecho del arquero Figueroa.
A los 20´ responde el verde, se escapa el paraguayo Alcides Miranda Moreno elude a dos hombres y pica por la punta derecha, cruza el centro y
Benítez remata rebotando la pelota en un defensor, vuelve a impactar Benítez y se va muy cerca del poste izquierdo del arquero Véliz.
Y finalmente en ese ida y vuelta a los 27´ llega la buena para Ituzaingó, se escapa Montiel por derecha, pasa entre dos, se queja un defensor de que al pasar le roza la cara, tira el centro y rebota en el brazo de un defensor, me quedan muchas dudas de si fue intencional pero el árbitro Pafundi no duda y localista como es cobra penal, ejecuta Soria y 1-0.
El CAVA asimila el golpe y antes de que termine el primer tiempo tuvo dos oportunidades muy claras de empatar pero la fatalidad decidía encarnizarse con la gente del meandro.
A los 32´ parecía que todo se llegaba lo noche para la visita cuando Gutiérrez aprovecha un contraataque del verde, se va por derecha, centra y Lugli se arroja con los pies para adelante, conecta la pelota que rebota en el palo derecho y se salva Victoriano, pero también se salva Ituzaingó cuando Ramos poco después cabecea un centro que llega desde la izquierda del ataque y la caprichosa se vuelve a estrellar contra el palo, esta vez a favor del local.
El segundo tiempo arranca con CAVA decidido a buscar el empate, pero su juego muere al borde del área grande y cada contra de Ituzaingó anunciaba que podía estirar diferencias.
La amenaza se concreta a los 10´ cuando luego de un error infantil del arquero Véliz, le entrega la pelota a Lugli quien aprovecha su oportunidad y se pone 2-0.
Victoriano Arenas no se da por vencido y se va a las barbas del arquero Figueroa que sufre más de un susto. La defensa del verde parece a punto de ser desbordada. Las escaladas de Pedreida, la inteligencia de Romay, la fuerza de Águila y Acosta más un Ramos ya ubicado decididamente como delantero complican en demasía al local y uno tiene la sensación que en cualquier momento descuenta el CAVA.
A los 18´ hay un córner a favor del león del oeste, va Benítez a ejecutarlo, los suplentes de Ituzaingó y de Victoriano Arenas de manera increíble están haciendo precalentamiento juntos en ese lado, parece que hubo algún cruce verbal que termino en un amontonamiento de jugadores que resulta en la expulsión del DT local De Cicco y del preparador físico del visitante. El nerviosismo gana el ánimo de todos en el estadio.
El ingreso de Rey en el local le da piernas frescas para el contragolpe y tuvo dos oportunidades en las que le faltó el enganche final para encarar a Véliz en soledad.
A los 33´ con un Victoriano Arenas que no se rinde nunca y se va al ataque sale una contra de manual por parte de Benítez que pone un pase entre líneas a la carrera para un Soria muy activo que encara al arquero y define bien, es el 3-0 que a cómo se estaba desarrollando el partido suena justo pero exagerado.
Victoriano va con vergüenza, con hidalguía a buscar aunque sea el gol del honor y llega a los 48´en medio del descuento final, muy buena jugada de Acevedo que la pone para Fleitas en el corazón del área local, el jugador del CAVA que la pone lejos del arquero y es el 3-1 final.
Ganó bien Ituzaingó, no por la diferencia que señala el marcador, pero con toda justicia y el verde se ilusiona con razón en estar bien en la punta del torneo. Para la gente del CAVA les queda la satisfacción de ver a su equipo pelear todas y cada una de las pelotas en juego, es un tropiezo que debe sumar como experiencia sin caer en ninguna depresión, porque esto señores… esto recién empieza.
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