Ella se llamaba Ana María Robertis. Me enseñó a leer y escribir y me acompañó un larguísimo día en el que hubo que evacuar el colegio N° 64 “Manuel Belgrano” de La Plata, porque el regimiento 7 de Infantería del Ejército, ubicado cruzando la calle, era aliado del general y estaba bajo amenaza de bombas por las fuerzas opositoras.
Mediante una red doméstica, terrenal y manual, todos los alumnos quedaron fuera del colegio, menos yo que esperaba que alguien, que no serían mis padres, pasara a retirarme. Mi padre trabajaba en Río Santiago y a mi madre le estaban haciendo una colecistografia en un hospital de Ensenada, distante 7 km. Ellos no serían los encargados de alejarme del peligro.
Los caminos de conexión con La Plata habían sido cerrados al tránsito vehicular. Por ello, mamá regresó caminando junto con la amiga que la acompañaba. Decidieron pasar por la escuela y lo que constataron fue que estaba cerrada y no había nadie en su interior.
Al caer la tarde, la mamá de mi compañera Graciela Trelles, me había retirado del colegio separándome del abrazo protector con mi seño que se había quedado en la escuela, imagino que rezando, para que los aviones que sobrevolaban el regimiento no lo bombardearan mientras nos encontrábamos en su interior.
¡Qué injusta fui cuando dije al comienzo de este post, que mi maestra de primer grado me había enseñado a leer y escribir! Ese día desgraciado, ella me enseñó un montón de valores.
Mi homenaje a quien cargó con esta historia, para acompañar a una niña de 6 años inocente y ajena de la locura de ciertos adultos.
Nota de Redacción: El Regimiento de Infantería Mecanizada "Coronel Conde" se encontraba en la calle 19 y 51 de La Plata, en los finales del año 1982 y principios del año 1983 se trasladó a la localidad de Arana |
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