A comienzos de la cuarentena, muchos se interrogaban acerca de por qué se producían compras infrecuentes de papel higiénico.
Algunos diarios europeos se ocuparon del tema consultando a expertos de la conducta humana, individual y social.
Recuerdo a una incomprobable "socióloga" que expuso, que dado que el papel higiénico es un producto que al ser retirado de la estantería, deja un espacio muy evidente, cuando el público nota el faltante, supone que escasea o escaseará, por lo cual, apenas es repuesto, corre de prisa a cargar varios paquetes en su carrito de compras.
El interrogante acerca de la compra exagerada de papel higiénico, surgía de quienes no están habituados a realizar las compras. Porque quienes se ocupan de ello, hicieron la siguiente evaluación:
Durante dos semanas en mi hogar comeremos todos y estaremos allí durante ese tiempo, al menos. Somos cuatro personas que comemos y todo lo demás.
Entonces, estamos frente a un enigma que se devela por la experiencia.
¡Todos a comer! Tiene su consecuencia inmediata.
