Un primer tiempo que empezó vibrante desde el minuto cero, con un Charro decidido a atacar para buscar la diferencia rápidamente, un Fabbiani bastante movedizo, Roldán tratando de conducir y juntarse con otro rapidito como Maraschi.
Pero arriesgando en el fondo, sintiendo cada contragolpe del “arrabalero”. Tan al límite en defensa Merlo, que a los 21 minutos, después de 2 o 3 faltas fuertes, vió la roja Jhon Trujillo.
El “Depo”, con 10, bajó el rendimiento y fué fórmula repetida, centros de Pajon buscando la cabeza de Fabbiani o el rebote para Maraschi.
A los 42 minutos empezó el show de Rubino. Tiro libre para Merlo, Roldán, cabezazo de Buzzi, gol del Charro!...lo gritó el país…Rubino no lo vió…Siga, siga… Contragolpe de Sportivo, González, 6 metros adelantado, el árbitro habilitó… y se salvó Merlo. Para el bien de muchos, especialmente para la terna arbitral, finalizó el primer tiempo 0 a 0.
Segundo tiempo, Merlo retrasado tratando de equilibrar fuerzas con uno menos, Sportivo que no tenía ideas, se hizo tedioso. Hasta los 15 minutos, en que Portillo, que entró por Trujillo, cometió una falta innecesaria y roja para el marcador de punta. Si con 10 el charro retrocedía con 9 se colgó del travesaño, no cruzó el medio de la cancha, la hinchada empezó a insultar al técnico y a los jugadores, tratando por cualquier medio incentivar o descargar la bronca.
Y a los 32 minutos, cuando se esperaba la segura derrota de Merlo, porque con dos menos y Sportivo jugando para ganar, un ataque aislado termina en tiro de esquina. Lo ejecuta Pajón, rebota en Salomone y GOOOL de Merlo. Los últimos 10 minutos fueron emocionantes, 9 hombres sin piernas, con cansancio, con nervios aguantando contra el mundo, un “arrabalero” que sabía que estaba descendiendo y atacaba jugándose la vida, 5 minutos de adicional y Rubino (que era un jugador mas de Sportivo). A los 50 minutos, sobre el final, empató Sportivo Barracas en un borbollón de jugadores, Ricci puso el 1 a 1 y final.
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